INTRODUCCIÓN
Datos
y filiación lingüística
La lengua yoruba pertenece a la rama kwa o del golfo de Guinea de la familia
lingüística nigero-congoleña, siendo hablada por unos 20 millones de personas distribuidas
principalmente por el sudeste de Nigeria (24.100.000) y en Benín (770.000).
Mercaderes y comerciantes de lengua yoruba han extendido su uso por el nordeste
de Ghana (250.000), Togo y el curso medio del río Níger, con inmigrantes en
otros países africanos, así como en el Reino Unido y los Estados Unidos. Aparte
de los que la tienen como primera lengua, muchos hablantes de lenguas
minoritarias de estas zonas hablan yoruba. El yoruba es uno de los idiomas
africanos más importantes, por lo que hoy es la lengua más notable del golfo de
Guinea, tanto por número de hablantes como por su desarrollo cultural y una de
las tres lenguas más habladas del África, lo que lo constituye en la lengua níger-congo
más hablada, superando incluso al suajili, pues hay que tener en cuenta que
ésta última es hablada por unos 35 millones de personas, pero la mayor parte la
usan como segunda lengua.
Dialectos
El yoruba normativo es un continuo dialectal
que comprende unos quince dialectos emparentados utilizados en tres áreas. Se usa
una variedad estándar, estrechamente relacionada pero no idéntica al dialecto
hablado en el estado sudoriental de Oyo, para la comunicación interdialectal en
educación, escritura y medios de comunicación.
Historia
La lengua yoruba fue una de las primeras
lenguas africanas en ser codificada en una gramática y diccionario, hacia
finales del siglo XIX por el lingüista Samuel Crowther, un yoruba vendido como
esclavo en 1821 y manumitido por los británicos y bautizado y ordenado como
misionero para servir en el país yoruba, por entonces muchos hablantes ya
habían sido llevados a América como esclavos. La actividad de los misioneros de
la Central Mission Society en
colaboración con los akú (esclavos liberados –el nombre que tomó de las iníciales
del saludo yoruba, ẹ kú áárọ, «buenos días»; y ẹ kú alẹ,
«buenas noches») le dotó de un sistema de escritura y hacia el año
1830 se realizan ya las primeras publicaciones. Aunque no hay tradición
literaria anterior a la época colonial, desde la creación del sistema de
escritura yoruba el lenguaje ha desarrollado un floreciente corpus de ficción.
En 1900 se tradujo la Biblia, iniciada y llevada a cabo, en parte, por
Crowther. Desde principios del siglo XX se desarrollo una literatura en yoruba,
tanto en prosa como en verso, que no ha cesado desde entonces, y su fama se le
debe, entre otras razones, por las cuatro novelas populares de Daniel Fagunwa.
ESCRITURA
Para escribir en yoruba se usa el alfabeto
latín sin las letras c, q, v,
x, z que se consideran innecesarias. El sistema de tonos se señala en
la escritura mediante tildes (grave para el alto, agudo para el bajo y sin
tilde para el medio). De igual forma se usa un punto diacrítico debajo de las
letras e, o y s para distinguir de
la ẹ y ọ abiertas y la ṣ
fricativa postalveolar sorda, respectivamente. Por lo tanto cuando estas letras
aparecen con punto son letras diferentes.
FONOLOGÍA
Pronunciación
figurada
Tonos
Hay un sistema de tonos relativamente simple:
alto, bajo y medio. El tono de una palabra puede verse afectado por la silaba
precedente. Tal sistema contribuye eficazmente a evitar la homonimia.
MORFOLOGÍA
Y SINTAXIS
Sustantivos
Ni el yoruba ni las lenguas de este grupo
presentan signos de clases nominales,. Tampoco distingue el género gramatical,
salvo, por medios léxicos, cuando es necesario (ejemplo: ọmọkọrin, «hijo»; ọmọbinrin,
«hija»), ni el plural que ha de deducirse del contexto. La palabra àwọn puede emplearse para ara indicar
pluralidad (ejemplo: àwọn
ọkùnrin, «los hombres»). Predominan las palabras
monosilábicas aunque los sustantivos tienen siempre dos sílabas o más. La
primera letra es, generalmente, una vocal.
POSESIÓN
La posesión se expresa posicionalmente, el
objeto poseído precede al poseedor. Esto es el orden normal para el referente
más atributivo, (ejemplo: àwọn
ọkùnrin, «los hombres»)
Adjetivos
La forma básica de las palabras descriptivas
comunes se construyen a partir de los verbos estáticos precedidos de una
partícula de tono alto formada por la primera consonante del adjetivo seguida
de la vocal «i». El verbo «ser grande» se
dice tóbi y el verbo «ser bueno» se
dice dára, pero si son adjetivos,
estos serán títóbi y dídára, respectivamente. Por lo
tanto, la gran mayoría de los adjetivos proceden de verbos y no existen como
palabras independientes. Formas reduplicadas, no asociadas con algún verbo
yoruba, también pueden encontrarse; Rowlands (1969) las llama palabras «fonoestéticas»: ejemplos: wúruwùru, «desordenado»; ṣákiṣàki, «áspero».
Por regla general, el adjetivo se coloca después del sustantivo, pero puede
precederlo para enfatizar; y en muchos casos, el yoruba prefiere utilizar una
clausula relativa; de esta manera, «casa
grande» puede decirse ilé
títóbi, títóbi ilé, ilé tí ó tóbi; donde, en éste
último caso en particular, tí ó tóbi
es la clausula que modifica a ilé, y
puede traducirse literalmente como «casa que es grande».
Pronombres
Dispone de cuatro series de pronombres
destinadas a las siguientes funciones: como sujeto, como complemento directo, y
una serie de pronombres especializan su uso en las oraciones negativa (con la
partícula kò) y nominal enfático.
Sujeto
|
Negativo
|
Objeto
|
Enfático
|
||
singular
|
1ª
|
mo
|
ng (***)
|
mi
|
èmi
|
2ª
|
o
|
o
|
ọ / ẹ
|
ìwọ
|
|
3ª
|
ó
|
-
|
se repite la vocal
inicial del verbo
|
òun
|
|
plural
|
1ª
|
a
|
a
|
wa
|
àwa
|
2ª
|
ẹ (*)
|
ẹ
|
nyin
|
ènyin
|
|
3ª
|
(n)wọ́n (**)
|
(n)wọn
|
wọn
|
àwọn
|
(*) El pronombre sujeto ẹ se usa para dirigirse a más de una persona (segunda persona del
plural sujeto; vosotros), pero
también se emplea como la forma de tratamiento de respeto correspondiente al
Usted en español: ẹ jókòó «sentaos» o «siéntese».
(**) El pronombre nwọ́n se pronuncia como si se escribiera wọ́n. Esta ortografía fue adoptada para distinguir el pronombre del
verbo wọ́n «ser querido».
(***) Los yorubas del sur emplean mi
en lugar de ng.
La palabra kò se usa en la
mayoría de los casos para cambiar oraciones afirmativas a negativas. Sí los
pronombres sujeto se emplea con la partícula negativa kò, el pronombre para él/ella, por lo general, se omite. De igual
forma, el pronombre mo «yo» cambia a ng antes de kò; ejemplo: mo lọ sọ́jà/
mo kò lọ sọ́jà; «yo (no) fui al mercado». Asimismo, después de a y ẹ la marca negativa kò no sólo pierde la letra k en el habla común, sino que también la
ò es asimilada por la vocal
precedente, de esta manera, la frase a
kò mọ̀ «nosotros no sabemos» se escucha como a à mọ̀ y ẹ kò mọ̀
como ẹ ẹ̀ mọ̀.
Los pronombres posesivos son:
SINGULAR
|
PLURAL
|
|||
1ª
|
mi
|
mío, míos; mía, mías
|
wa
|
nuestro, nuestros; nuestra, nuestras
|
2ª
|
(r)ẹ
|
tuyo, tuyos; tuya, tuyas
|
(n)yín
|
vuestro, vuestros; vuestra, vuestras
|
3ª
|
(r)ẹ̀
|
suyo, suyos; suya, suyas
|
wọn
|
suyo, suyos; suya, suyas
|
Ejemplo:
ilé
wa
|
nuestra casa
|
ẹ̀gbọ́n
mi
|
mi hermano mayor
|
Éstos son unidos fonotácticamente a la vocal final del referente que le
precede, lo cual influye en un cambio tonal y cuantitativo de la vocal final de
la palabra precedente, es decir, que se tiende a alargar la vocal final de la
palabra que está antes, al tiempo que se suele cambiar el tono, generalmente,
un tono bajo para antes de mi y rẹ y un tono medio para el resto de las
formas, ejemplos: ọmọ mi dà? (ọmọọ̀ mi) «¿Dónde está mi niño? », ilé wa kò tóbi (ilée wa) «nuestra casa no es grande». En el habla coloquial, rẹ y rẹ̀ pierden la
letra r.
Ejemplos de repetición de vocal en la tercera persona forma objeto: ó rí i «él/ella la/lo vio», ó rà a «él/ella la/lo compró».
PRONOMBRES DEMOSTRATIVOS
El Yoruba emplea dos pronombres demostrativos: èyí («éste, ésta, esto»), para indicar cercanía e ìyẹn («aquel, aquello/ese, eso, esa»), para referir lejanía.
Ambos pueden convertirse en plural al prefijarse con el pronombre de la tercera
persona del plural àwọn,
resultando wọ̀nyí («estos,
estas») y wọ̀nyẹn («aquellos, aquellas/esos,
esas»)
respectivamente.
PRONOMBRES INTERROGATIVOS
Los pronombres interrogativos son tani «¿quién? » y kíni «¿Qué? ». Cuando tani es
el sujeto de la oración, pueden oírse dos variaciones que van a depender del
dialecto. Tal’ó rà á/taní rà á? «¿Quién lo compró?». Ambas
formas son la contracción de tani ó rà
á?. Tanto en la forma hablada del yoruba septentrional como la literaria,
la partícula ni es removida, mientras
que en el sur, la ó es eliminada y
su tono pasa a la partícula ni.
PRONOMBRES RELATIVOS
El pronombre relativo tí es invariable y requiere recapitulación si el antecedente es un
sustantivo o pronombre. Se coloca siempre después de un nombre y puede
traducirse al español como «que», ejemplo: nǹakan tí mo fẹ́, «cosas que quiero».
De uso similar es pé, salvo que la
única diferencia es que éste va únicamente después de los verbos: Ó sọ pé Olú fẹ́ jẹun «él dijo que
Olú quiere comer».
Numerales
Los numerales básicos del yoruba son fáciles de
entender y simples de manejas, pero conforme la cifras se van haciendo mucho
más grandes, su manejo se va haciendo cada vez más complicado, al punto que
muchos yorubas que no pueden usarlos, prefieren utilizar sus contrapartes en
inglés. El sistema tradicional se desarrolló durante el tiempo en que se
empleaban caracolillos como monedas, los cuales eran apilados y por medio de
sumas y restas se llegaba a la cantidad requerida. Esto explica porqué la sustracción
juega un papel importante en este sistema y, aunque ya no se usan caracolas
como dinero, una serie de numerales contienen, aunque sea de forma residual, la
palabra owó «dinero».
Su sistema de numeración utiliza dos series: una iniciada con el tono bajo y
otra que recibe el prefijo m- y
cambia el tono bajo por el alto. Los
diez primeros números son:
1
|
2
|
3
|
4
|
5
|
6
|
7
|
8
|
9
|
10
|
ení, ọ̀kan (*)
|
èjì
|
ẹ̀ta
|
ẹ̀rin
|
àrún
|
ẹ̀fà
|
èje
|
ẹ̀jọ
|
ẹ̀sán
|
ẹ̀wá
|
(*) El
número ọ̀kan es la contracción de «owó ọ̀kan» una caracola. Los números del
2 al 10, el 20 y el 30 son análogos.
Del 10 al 20 la fórmula es la siguiente: 10+1,
2, 3, 4,5; 20–4, 3,2,1; esto quiere decir que a partir del 15, las caracolas
comenzaban a ser restadas a la pila del 20, en lugar de ser añadidas a la pila
de 10. De esta manera, 23 es expresado mẹ́ta.le.lógún
(ogún=20) y 27 es mètà.dí.lọ́gbọ̀n (ọgbọ̀n=20). A partir del número 40 utiliza el
sistema vigesimal. Dada la extremada complejidad de este sistema, poco a poco
va cayendo en desuso a favor del sistema decimal.
Verbos
Los verbos yoruba son invariables y
monosilábicos. No señalan persona, ni número, por esa razón el pronombre
personal siempre es requerido. Se inician con una consonante y a veces sólo
distinguen su significado mediante el tono para evitar homonimia, ejemplo: dè, «esperar, aguardar»; dé,
«llegar,
acontecer»; rò, «pensar, consultar»; ro,
«labrar/arar/cultivar
la tierra».
Algunas formas verbales se crean mediante un
compuesto de dos palabras (verbos+sustantivos), por ejemplo, dáhùn «responder», se forma a
partir de dá «hacer, crear» + ohùn «voz». Los verbos transitivos que se forman de esta manera pueden
separarse, apareciendo siempre entre ellos el predicado: rígbà «tener (del verbo poseer), obtener», mo rí owó gbà «tenía el
dinero».
TIEMPOS VERBALES
Sólo distinguen dos tiempos: presente y futuro.
Los tiempos vienen indicados por partículas que se colocan unas veces ante el
verbo y otras veces tras él. Tanto el verbo como las partículas son
monosilábicas. Los verbos yoruba no contienen ninguna distinción entre el
tiempo pasado y el tiempo presente, por lo que hay que tener en cuenta siempre
este hecho al trabajar con nuevos verbos. El tiempo pasado en yoruba se determina
empleando la raíz simple de un verbo, siempre y cuando este verbo sea de acción (como por ejemplo, ir,, ver o caminar), el cual transmite implícitamente el significado
de una acción completada en el pasado, por ejemplo, la oración mo rìn se traduce como «yo caminé». Por otra parte, si el verbo no es un verbo de acción,
entonces la traducción será neutral, por ejemplo, mo wà nílé se podrá traducir como «estoy/estuve en casa». Sin
embargo, muchas veces la traducción al tiempo correcto será dada por el sentido
de la oración. La forma infinitiva, por tanto, también podrá traducirse al
tiempo presente cuando el sentido de la oración lo requiera, por tanto: mo
gbọ́ podrá traducirse como «yo escucho/oigo». Este tiempo
es negado con la partícula negativa kò:
mo kò gbọ́ «no escucho, no oigo». El tiempo
futuro se construye empleando la partícula yió
→ ó
+ la raíz del verbo; la serie ng de las marcas pronominales se usan
para indicar el sujeto, por ejemplo: ng
ó wa lọ́là «iré mañana». En la lengua hablada, esta forma
generalmente se niega por la frase (ng)
kò ní(ị̀) «no voy a…»; ng kò ní
ṣe e «no voy a hacerlo». De
igual forma, puede emplearse la partícula máa
para indicar que una oración va
a tomar lugar en el futuro: mo
máa wẹ̀ lọ́là «tomaré un baño mañana».
ASPECTO
Los verbos yorubas señalan también el aspecto
(perfectivo e imperfectivo), los cuales son señalados por partículas que
aparecen entre el sujeto y el verbo: el progresivo o imperfectivo se señala con
ń-/ ḿ-, y se niega con ko/ki: nwọ́n ńgó «ellos han de jugar», ó ńṣiṣẹ́ «él ha de
trabajar» y el perfectivo, el cual hace referencia tanto
al pasado como al futuro, se hace con la partícula ti: mo ti ṣe gbogbo iṣẹ́
«yo he estado haciendo todo el trabajo». El imperfectivo indica una acción en progreso en el pasado o presente o
una acción habitual. Se puede combinar con el perfectivo para señalar el inicio
de una acción en el pasado: mo ti ńṣiṣẹ́ lati àárọ̀ «yo he estado trabajando desde esta mañana». La negación se hace con kò en
la clausulas principales y con má en
las prohibiciones y clausulas subordinadas.
Preposiciones
Aunque es rico en partículas para la formación de palabras, es pobre en
preposiciones. Las que hay son primarias o derivadas. Algunas de las más
importantes son: láti, «para, desde»;
lẹ́hìn tí/ti…b «detrás de, atrás»; sí,
«para»; ní «en».
Orden de las palabras
El orden habitual de la oración es el de SUJETO + VERBO + COMPLEMENTOS.
Bibliografía
- PromotoraEspañola de Lingüistica (Proel)
- Wikipedia
- Schleicher, A.Y.F. (2008) Colloquial Yoruba, London and New York
- Rowlands's Teach Yourself Yoruba (1969)
- Almeida, Antônia Maria. Baraúna, Gilberto Simões. Gramática yorùbá para quem fala português (2001) Sociedade de Preservação de Língua Yorùbá no Brasil. Editorial: Sociedade de Preservação de Língua Yorùbá no Brasi, Salvador, Bahia
- George L. Campbell. The Routledge Concise Compendium of the World's Languages, Second Edition